miércoles, 9 de enero de 2008

¿a dónde van los patos?

"Hay algo que es seguro, te encontraré en algún lugar: donde quiera que estés; no dejaré de buscar. Pues aunque estés lejos, siempre permaneces a mi lado, junto a mi corazón. Justo ahora te encuentras perdida entre las sombras, tratando de volver a casa, y tratando de liberarte esperas a que te alcance para, juntas, tocar las puertas del cielo.
Me habría gustado abrazarte y no dejarte ir pero, ambas lo sabíamos, tenías que adelantar tu partida".
Mientras leo, una y otra vez, estas líneas, trato de recordar el momento preciso en que te volví a recordar. Creo que lo primero que vino a mi mente, fue el contacto de tu dedo meñique junto al mío. Lo segundo fue el recordatorio de mis hermanas: "no me importaría ser hija única". Mientras en mi interior sentía la mezcla de vacío y vértigo, al escuchar estas palabras.
Tú no estas... ¿dónde estas?
El último golpe lo asestó mamá, cuando me confirmó lo que yo ya sospechaba, te habías marchado dejándome detrás, sola...sin ti. Pero entonces entendí porque te extrañaba tanto, aun sin conocerte...pero no, si te conocía, antes que a nadie...antes que a todos, y en mi mano quedó grabado el recuerdo del contacto con tu dedo meñique.
Leyendo estas líneas, sentada en el parque frente al lago, diciéndote adiós, me pregunto: ¿a dónde van los patos en diciembre?

domingo, 6 de enero de 2008

Y ahora ¿qué?



Quizás esta noche llueva, y la lluvia borre la huella de tu olor en mi piel. Quizás esta noche haga frío, pues deseo entrar en calor. Quizás la sabana se humedezca con mi sudor...o tal vez me engaño y son mis lagrimas que caen contra mi voluntad, dajándome saber que, por más alcohol que corra en mis venas, tu recuerdo se niega a abandonarme.
Quizás mañana la lluvia deje de caer y el recuerdo de tu boca ya no este. Quizás...pero mi cuerpo no resiste tanta espera. Hazme un favor lluvia: vete de una buena vez.

martes, 1 de enero de 2008

Gravity

Rompe la gravedad de mis pies. Rómpela, deseo flotar, hacía el espacio, hacía el más allá; donde nada me sostiene, donde nada me ha de aplastar.





La gravedad me arrastra hasta el centro del mundo; me arrrastra, me arrastrará...hasta que del tiempo no quede nada más que un recuerdo voraz.